Epitafio arboriforme
Se murió,
andaba desaparecido, o bueno... eso era lo que pensaba la gente. Multitudes,
ciudadanos, policías y sabuesos lo buscaron por rascacielos y cloacas. No podían con
la desolación en su corazón, necesitaban hallarlo y aún guardaban un gajo de
esperanza, el cual de nada sirvió... porque al acercarse lentamente a aquel
viejo árbol encontraron un cuerpo inerte, rodeado de bella sangre escarlata.
Allí murió, donde hacia algunos años había comenzado a vivir; murió allí, donde
tú y yo nos conocimos; así de simple, en aquellas raíces... se suicidó nuestro
amor.
Comentarios
Publicar un comentario